El laboratorio nacional Microsules, propiedad de la familia Breitman, obtuvo el certificado de “Buenas prácticas de fabricación de productos veterinarios” por parte del Servicio Nacional de sanidad y calidad agroalimentaria (SENASA) para su planta de Avellaneda, en donde se manufacturan los antiparasitarios ricobendazol e ivermectina, y el exipiente glicerol.
Además, los procesos certificados fueron la elaboración, el acondicionamiento y depósito de productos veterinarios y el desarrollo de estériles y no estériles con excepción de antibióticos betalactámicos y hormonales.
La empresa está en el mercado de animal health desde hace 30 años y enfoca sus intereses en la venta a terceros. Sus principales clientes son Bayer, Bagó, y Brouwer.